Cómo crear un jardín japonés

Cómo crear un jardín japonés

Una casa con jardín es sinónimo de paz, tranquilidad y belleza. No obstante, también podemos verlo desde el otro lado y pensar en que una casa con jardín es sinónimo de trabajo y fuerza de voluntad. Sea como fuere, tener jardín en tu propio hogar es un lujo y una manera ideal de otorgarle belleza.

En este sentido, ya te hablamos hace unas semanas de diferentes estilos de jardín que existen para que pudieses conocerlos y, más concretamente, hicimos hincapié en el estilo más nuestro: el jardín mediterráneo. Hoy queremos contarte las características del jardín japonés, para que puedas conocerlo en profundidad y enamorarte de él.

El jardín japonés es uno de las más complicados de conseguir. Su objetivo es representar al país al que da nombre y, para ello, incluye numerosos elementos en perfecta armonía, como agua, rocas, plantas… No obstante, si quieres conseguir tener un jardín de estilo japonés en tu casa, te damos algunas pistas para conseguirlo:

  • Necesitas una charca. Una de las peculiaridades de este jardín es que suele contener una charca o lago, donde ubicar una roca que simule una isla y en representación de la energía, la vitalidad y el flujo constante.
  • Rocas por todos lados. Además del agua, las rocas son un elemento imprescindible en este tipo de jardín. Simbolizan las islas y los archipiélagos, además del cosmos. En concreto, las rocas de origen volcánico, como el basalto, son las más utilizadas, aunque puedes poner cualquiera.
  • Lee el Sakuteiki. Este es un texto antiguo, nacido en el siglo XII, donde se marcan las pautas principales y más importantes para crear un jardín al estilo japonés. En él, podrás encontrar que los jardines japoneses están basados en el equilibrio y en que todo lo que contienen es necesario: no faltará ni sobrará nada.
  • El protagonista: el arce japonés. Aunque se pueden añadir muchas más plantas, el arce japonés es la especie protagonista. Contienen hojas que pueden ser rojas, amarillas o verdes durante el otoño. Par su crecimiento se requieren suelos fértiles y algo ácidos.
  • Otras especies… Además de la anterior, existen otras muchas especies de plantas acordes a este tipo de jardín. Algunas de ellas son el bambú, los helechos, el haya japonesa, la camelia, los crisantemos, los narcisos, el enebro chino, el mirto, el pino enano, los cerezos, la flor ave del paraíso…
  • Anímate con una casa del té. Una de las características de estos jardines es que eran utilizados para celebrar la ceremonia del té. Por eso, si tienes suficiente espacio, no está de más poner una casa o pabellón del té donde celebrar esta ceremonia o rituales de relajación.