¿Imaginas que la jardinería se convirtiese en una asignatura en las aulas escolares? ¿Crees que sería beneficioso para el alumnado? ¡Lee este post, queremos contarte todos los detalles! 🙂
No es nada nuevo que la jardinería forme parte de muchas aulas educativas. De hecho, existen centros escolares donde los alumnos cuidan de sus huertos y/o de plantas durante todo el año. Aunque, por supuesto, no se trata de una asignatura curricular, es una forma de poner en valor numerosos elementos que, sin la ayuda de la jardinería, serían imposibles.
Por eso, a continuación, queremos hablarte de por qué la jardinería debería formar parte de cualquier aula escolar. O, dicho de otro modo, cuáles son los beneficios de hacerlo. ¿Empezamos? ¡Empezamos!
- Fomenta la unión entre alumnos/as. Cuando el alumnado tiene un objetivo común, indudablemente, se fomentará la unión entre todos ellos.
- Permite enseñar biología o ciencias naturales de forma práctica. Esta es, sin duda, una de las grandes ventajas. ¡Permite que los alumnos dejen a un lado el libro y se centren en la práctica!
- Desarrolla la motricidad fina. Esta es aquella que se centra en la coordinación entre músculos, huesos, nervios y otros elementos del cuerpo para producir movimientos precisos.